La Tierra en bicicleta: En el país de los Incas

Luego de escalar el Huayna Potosi y el consecuente dolor muscular posterior, nos dirigimos a Cuzco. Pedaleamos a lo largo del enorme Lago Titicaca antes de entrar en la impresionante región del Valle Sagrado en Perú.

Parcours cycliste 1999233 - powered by Bikemap

Hay disponibles varias formas de salir de La Paz en nuestra bicicleta. El camino difícil,era usando éste (pulse sobre la imagen para iniciar el video)

Nosotros elegimos el camino "más seguro" y más fácil, a través de la autopista.

Una larga subida de 500 metros de El Alto ..

Después de 2h30min, finalmente regresamos a El Alto donde disfrutamos un almuerzo en un tradicional patio de comidas boliviano. La ruta de salida desde El Alto también está muy ocupada, con un flujo interminable de minibuses, bocinazos y paradas justo delante de nosotros para que los pasajeros bajen o suban. La lluvia nos golpea, pero afortunadamente, hay una estación de peaje! Por lo tanto tenemos un descanso antes de llegar a Huarina. Estamos a orillas del lago Titicaca y de vuelta en el campo boliviano, pero esta vez la dura carne de alpaca es sustituida por una deliciosa trucha frita.

"Hay trucha!"

A la mañana siguiente, arrancamos un poquito más tarde luego de una trucha frita (otra vez?!) para el desayuno. Tratamos de organizar un pequeño crucero a Puno en la parte peruana del lago. Por desgracia, los cruceros internacionales ya no existen, aunque nuestro mapa nos diga lo contrario.

Parece que el mapa es erróneo

Séb y un típico paisaje de Titicaca

Por lo tanto, nos reencaminamos hacia Copacabana. Durante la tarde, llegamos al estrecho de Tiquina: nuestro primer cruce en barco en América del Sur! Nos embarcamos, acuñando nuestras bicicletas junto a un autobús que se está balanceando peligrosamente mientras las olas sacuden el ferry.

un transbordador cargado

Sosteniendo nuestras bicis durante el cruce

Dos jóvenes marineros trabajando en el ferry

El camino costero nos agota con sus numerosas subidas y bajadas. Sin embargo, los paisajes mágicos del lago y algunos encuentros agradables nos mantienen motivados. En la base de una colina, un grupo de niños estaba reunido. Cuando nos ven, todos corren hacia nosotros, saludándonos y empujando nuestras cargadas bicicletas cuesta arriba! Más tarde, me alcanzó Nicolás, un joven ciclista quien viaja conmigo por un tiempo. Charlamos sobre su sueño de convertirse en un ciclista profesional antes que regresara con otro joven ciclista que venía en dirección opuesta.

Nicolás con su bicicleta de entrenamiento

Cae la noche. Todavía tenemos 20 kilómetros para andar y un paso que atravezar antes de la última cuesta abajo a Copacabana. La carretera está en buen estado, con poco tráfico y con incrustaciones reflectoras que nos guían perfectamente. Llegamos agotados en un hotel bajo una ligera pero fría lluvia.

Mejor nos apuramos!

Descansamos al día siguiente en Copacabana y disfrutamos de un pequeño paseo en barco a la Isla del Sol, en el lago navegable más alto del mundo.

En el camino a la Isla del Sol

Esto es lo que llamamos un buen día de descanso!

Nuestro último día en Bolivia es fácil. Hay muy poco tráfico, ningún problema en la aduana y el camino es prácticamente llano o cuesta abajo por el lago.

Campos de Quinoa

Agradable camino asfaltado hacia Juli

Perros del lago Titicaca, parecen mas calmados que sus contrapartes sureños...

Maravilloso día para andar en bici

A la mañana siguiente, comenzamos desde Juli después de un real desayuno.

Lomo montado: bife con papas fritas y huevos fritos.

En nuestro camino a Puno, nos cruzamos con Radu, a viajero en bici Rumano. El está viajando solo desde Perú hasta Bolivia.Bajo la mirada un poquito sorprendida de los locales, intercambiamos información, mapas y tomamos una foto grupal antes de continuar nuestros respectivos caminos.

Foto grupal con Radu y un ciclista local

Llegamos temprano en la muy turística Puno y disfrutamos nuestra última ciudad de El Lago Titicaca

Puno

Durante el almuerzo del día siguiente, obtenemos un buen consejo de un transeúnte en Juliaca. El camino que estamos siguiendo tiene mucho tráfico y se recomienda tomar un camino alternativo que pasa a través de Lampa. Este pueblo y su enorme y preciosa iglesia han sido olvidados por el crecimiento económico de las orillas del lago alrededor de Juliaca y Puno. Cambiamos de opinión y decidimos dormir en Lampa.

En el camino a Lampa, una amigable advertencia

En Lampa, el dueño del hotel es también el profesor de deporte de la escuela local y él seguía trabajando cuando llegamos al final de la tarde. Por lo tanto, esperamos alrededor de una merienda, cuando de repente aparece, en busca de nosotros!

100% Peruana: Cerveza Cuzqueña (elaborada en Cuzco) e Inca Kola

La iglesia en Lampa (toma de larga exposición nocturna)

A la mañana siguiente, preguntamos a un grupo de policías sobre el camino que nos llevara denuevo al camino inicial. Aunque el pueblo más cercano se encuentra a sólo 20 km más lejos, no son capaces de indicar cuál es el camino que debemos tomar. Después de algunas bromas dudosas sobre mi nombre ("Shakira") y la calidad de nuestras bicicletas, un policía le pregunta a su jefe por donde pasar. Después de otros chistes dudosos, nos despedimos de esta compañía. Luego de un pequeño paso y con casi exactamente 6.500km de andar, mi cadena se rompe.

Afortunadamente, tengo una cadena de repuesto rápidamente instalable

El eslabón más débil ...

Después de una rápida reparación, estoy en el camino (de tierra) con una nueva cadena. Luego de un día normal de andar, dormimos en Ayaviri.

Esperábamos que el siguiente día fuera la etapa más dura del viaje desde La Paz hasta Cuzco: 110 km de camino con un paso a 4.438 m entre medio. El día comenzó ayudando a un granjero a empujar su auto fuera del barro y al mismo tiempo nos llenamos de tierra. En el almuerzo, el cocinero nos trajo buenas noticias : el camino que va cuesta arriba hacia el paso es constante y de fácil ascenso. Y de hecho, nos tomó mucho menos tiempo y energía de lo que esperábamos para la subida al paso.

Ahora, 40 km de bajada nos espera

Durante el descenso, pasamos por muchos pequeños pueblos. Un par de veces, grupos de niños pequeños
"espontáneamente" nos ruegan por dinero lo que nos da una extraña impresión de la percepción local sobre los "gringos bici-viajeros". Algunos buenos recuerdos sin embargo : en algún momento, nos adelanta una locomotora de mantenimiento que lleva 6 trabajadores ferroviarios. La carrera está en marcha! Todos nos reímos y animábamos al otro hasta que finalmente ellos tomaron ventaja y desaparecieron en el horizonte.

Los últimos dos días hasta Cuzco, el paisaje continúa siendo montañoso, con los primeros Andenes
( campos escalonados)

Andenes

Un bus sobrecargado adelanta a Martin

La última tarde antes de Cuzco, llegamos a Urcos justo antes de la tormenta diaria. Demasiados cansados para negociar,aceptamos dormir en un hotel en renovación. Gran error! Pagamos demasiado y nos despertamos a las 6 am por los trabajadores de la construcción que arrastraban ladrillos por encima de nuestras cabezas. Después de ésta corta noche, nos sacamos de encima los últimos 50km a Cuzco en un poquito más de medio día.

Estamos cansados pero felices de llegar a Cuzco. Los padres de Séb se han unido a nosotros por unos días y se siente genial verlos nuevamente! Nos trajeron algunas piezas de repuesto, junto con Chocolate Suizo y Calvados Francés (para Martin ;-) ! ). Muchas gracias por este apoyo logístico!